Fernando Alcalá iba para abogado, pero su pasión por la cocina y el vino le hicieron colgar la toga para comenzar su andadura en el mundo de la gastronomía. Durante el verano de 2013, mientras estaba trabajando en un bufete de Suiza, le surgió la oportunidad de adquirir un restaurante en un local familiar y crea el restaurante KAVA Marbella. Actualmente, además del restaurante ha creado otro concepto en el Bar Cochino.